¿Alguna vez pensaste que podrías servir un risotto cremoso, por ejemplo, cocido al punto justo, con el mismo nivel de sofisticación que un restaurante de alta gama, sin pasar horas revolviendo en la cocina?
Hasta hace poco, la respuesta era no. Porque la cocina de autor —esa que nos emociona por su sabor, su presentación, su técnica— parecía reservada a chefs y cocinas de alta gama. Pero eso cambió. Hoy, con HERVOR en tu casa, vos podés ser el chef. Para tus amigos, para tu familia, para tu pareja o para vos.
Y no se trata de una promesa al aire: hablamos de platos listos en 10 a 20 minutos, con el sello de autoría que distingue a lo que está hecho con conocimiento, con respeto por el producto y con una mirada creativa sobre la comida. El secreto está en la técnica, en la curaduría y en una marca que supo unir arte, ciencia y sabor: HERVOR, de mi cocina a tu casa.
¿Por qué cocina de autor?
Porque cada receta fue pensada, probada y ajustada con precisión. No hay improvisación: hay investigación, pruebas, errores y aciertos. Como en un estudio de arte, cada plato que llega a tu casa es el resultado de un proceso creativo y técnico que tiene detrás a cocineros profesionales. El menú es breve, pero memorable. Y eso es una decisión: menos es más cuando todo está hecho para destacar.
¿Y por qué dos tipos de cocción?
Porque en HERVOR conviven dos mundos: el de la cocina tradicional (con braseados, sellados, fondos de cocción) y el de la cocción al vacío a baja temperatura. Cada plato se elabora con la técnica más adecuada para su ingrediente y su sabor. Luego se enfría y se congela, sin conservantes, para llegar a tu casa listo para regenerar con un simple paso.
La cocción al vacío conserva jugos, aromas y texturas. La tradicional aporta carácter, caramelización y profundidad. En esa combinación está la magia de una propuesta única.
Alta cocina sin intermediarios
Esta es una nueva forma de vivir la cocina. No solo para ocasiones especiales, sino para cualquier día en el que quieras darte un gusto, compartir algo inolvidable o simplemente comer bien, sin estrés ni sacrificio. El emplatado es tuyo. El brindis también. Vos elegís cómo vivir esta experiencia. Porque ahora, la alta cocina sucede en tu casa. Y vos sos protagonista.
Lo mejor está al alcance de tu plato.